El Nueva York clásico: guía para un fin de semana

Viernes

Noche - Haga una escapada

Con frecuentes vuelos a Nueva York desde Londres, los horarios de British Airways le ofrecen flexibilidad. Tome el vuelo de las 19:00 desde London Heathrow al aeropuerto JFK. Aterrizará un poco después de las 22:00, lo que significa que podrá estar en el centro de la ciudad una hora más tarde, justo a tiempo para tomar unas copas o para disfrutar de un sueño reparador; usted decide.

Si es la primera vez que visita la ciudad, es buena idea alojarse en el centro de Manhattan para tener un fácil acceso a los lugares emblemáticos. El hotel InterContinental New York Barclay es sinónimo de lujo a la antigua usanza: entre los clásicos que heredó de la década de 1920 cabe mencionar su mobiliario de estilo art déco, los muebles geométricos y un glamuroso bar en el que sirven tragos clásicos.

Sábado

07:30 - Combata el desfase horario

Seguro que se levanta temprano, así que comience el día con un buen desayuno. El restaurante Clock Tower, ubicado en The New York EDITION, abre a las 7 de la mañana. El establecimiento está decorado con muebles de caoba y en sus paredes cuelgan muchas fotografías antiguas en marcos relucientes. Observe lo que incluye un desayuno inglés en Nueva York (no se preocupe, podrá degustar unas deliciosas "baked beans"), y tal vez sea buena idea probar también un bagel con queso crema para disfrutar del clásico sabor de Nueva York.

09:00 | Hora de devorar cultura

Pasee por el maravilloso Central Park hacia el norte para llegar al Metropolitan Museum of Art, la institución más extensa de la ciudad. Las puertas abren a las 10:00 y por lo general a esa hora ya hay una fila que llega hasta el final de la manzana, así que es recomendable llegar un poco más temprano. Una vez dentro, la mayoría de la gente se dirigirá directamente a las galerías de las colecciones egipcias del primer piso. Por tanto, le recomendamos que ponga rumbo al piso de arriba, donde atravesará un laberinto de pinturas y objetos en relativa paz.

14:00 - NYC 360

Ahora que ya ha visto el parque desde abajo, es hora de verlo desde arriba. Si no le apetece hacer cola para ver el Empire State Building, disfrute de mejores vistas desde Top of the Rock, uno de los edificios art déco del Rockefeller Center, que cuenta con plataformas de observación, tanto exteriores como interiores, en las plantas 67, 69 y 70. Disfrutará de vistas panorámicas que le permitirán ver tanto Central Park como el Empire State Building.

15:30 - Que empiece el espectáculo

Broadway es una zona de la ciudad que siempre está a rebosar de gente. Si desea asistir a un espectáculo concreto, no se olvide de sacar los billetes antes de viajar. Si no ha sacado los billetes antes y es flexible en cuanto a los espectáculos, es el momento de dirigirse a la cabina de TKTS de Times Square para ver qué entradas del mismo día están todavía a la venta. Curiosee por la zona y diríjase después a su hotel para asearse y prepararse para afrontar la noche que le espera.

18:00 - Pique algo antes de asistir al teatro

Tendrá que reservar con antelación: las horas anteriores a la apertura del telón son las más solicitadas. Joe Allen es el restaurante más emblemático del Distrito de Teatros, y no es de extrañar. Estrellas de Broadway de ayer y de hoy adoran este agradable lugar situado en la planta baja de una vivienda adosada. El menú, americano de pura cepa, ofrece platos entre los que se incluyen el pastel de cangrejo, la ensalada césar y el bistec Nueva York en tiras.

22:00 - De copas

Termine la noche con una copa y dese un capricho en el restaurante Palm Court, que se encuentra en The Plaza, en el límite de Central Park. El hotel The Plaza, toda una institución neoyorquina, es el lugar perfecto para tomar una copa de lujo en la ciudad; por eso F. Scott Fitzgerald pensó que sería el lugar ideal para que su extravagante personaje, Jay Gatsby, se tomase aquí el famoso cóctel Mint Julep. Aquí todo es opulento, desde la inmensa cúpula de vidrieras hasta los cócteles que se mezclan y se preparan bajo la misma: un broche de oro para disfrutar de un primer día completo en la ciudad.

Domingo

Mediodía - La hora de degustar una porción de pizza

Después de un sábado repleto de aventuras, dése un respiro y disfrute de un domingo tranquilo. Pero, que no se le peguen las sábanas. Tome el tren A hacia High Street en Brooklyn para probar las pizzas al carbón del restaurante Julianna's Pizza. Los lugareños las prefieren a las del cercano restaurante Grimaldi. Abre a las 11:30 los domingos y es habitual que haya un grupo de gente esperando a que salgan sus pasteles de pizza margarita y la pizza blanca con salchicha y brócoli rabé o broccolini. La entrada peatonal al puente de Brooklyn está tan solo a unas cuantas manzanas de distancia, por lo que puede cruzar a pie el tramo más emblemático, teniendo el skyline de Manhattan como telón de fondo, a la vez que quema las calorías de la pizza.

14:00 - Pasado y presente

Al salir del puente del lado de Manhattan, se encontrará en el extremo sur de la isla. Desde allí y a tan solo unas manzanas se encuentra Wall Street, con el edificio de la Bolsa y la famosa estatua del toro. La Bolsa está cerrada los domingos, así que este día hay bastante tranquilidad para poder apreciar la mezcla de edificios históricos y construcciones más modernas. Ponga rumbo al oeste y se topará con The Oculus, la nueva e intrincada estación de metro, diseñada por Santiago Calatrava, y que costó 4 000 millones de dólares. Al lado se encuentra el One World Trade Center, donde podrá hacer una visita al 9/11 Memorial Plaza.

16:00 - Regreso a casa

Seguramente no esté preparado para despedirse de Nueva York, pero por el momento ya es hora de poner rumbo al JFK y volver a casa. El vuelo de las 19:25 desde el JFK aterriza en Heathrow a las 07:20, de modo que tras un relajante vuelo estará listo para esa reunión de primera hora de la mañana.

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